Con una reseña en la que se mencionó que el colegio Braulio González, fue el pionero en Colombia en la implementación del programa de Jueces Escolares de Paz, se dio la posesión de los 78 estudiantes de esta institución educativa, quienes tendrán la gran responsabilidad de mediar en conflictos que surgen en las aulas escolares y generar alternativas de resolución pacífica entre los estudiantes.
Durante el acto de posesión de los jóvenes líderes, la secretaria de Educación de Yopal, Lida Zaret Gamboa González, resaltó el importante papel de los estudiantes en este momento histórico, debido a que son quienes forjarán la historia de una nueva Colombia, la de un país en paz.
“Ustedes representan a personas que pueden cambiar la historia de un territorio; ustedes podrán realizar significativos aportes a la construcción de la democracia, desde la diferencia, desde el respeto por el otro y lo más valioso, es que aprenderán herramientas para solucionar controversias a través del diálogo”, dijo la secretaria de Educación de Yopal, en medio de la jornada de posesión de los nuevos Jueces Escolares de Paz.
Contexto
Este programa fue implementado por el Braulio González en el año 2006, en medio de una compleja situación que atravesaba la institución educativa, en donde se presentaba una conflictividad permanente y ninguna medida coercitiva funcionaba, para apaciguar los ánimos en la comunidad estudiantil.
Fue entonces cuando se gestó una idea entre los docentes Hernán Fajardo, coordinador de Disciplina y el profesor José Israel Vargas, para crear la figura de los Jueces Escolares de Paz, con el fin de contribuir a la sana convivencia escolar y la solución de los conflictos, a través de la mediación, la negociación y la conciliación como formas alternativas.
Este programa de Jueces Escolares de Paz, es apoyado por la Secretaría de Educación de Yopal, a través de funcionarios de la dirección de Calidad Educativa, quienes contribuyen con la sensibilización a docentes y la capacitación de estudiantes en la resolución de conflictos tipo 1 que corresponden a problemas manejados inadecuadamente; situaciones esporádicas que inciden negativamente en el clima escolar y especialmente, se busca que en ningún caso haya una circunstancia que afecte la integridad de los estudiantes.