Con la intensificación de las campañas educativas en materia de prevención vial, continúa trabajando la Dirección de Tránsito Departamental para disminuir las tasas de accidentalidad que se registran en esta zona del país.
Las más recientes charlas se dictaron en Tauramena, Aguazul y Monterrey. En esta última población, la labor no solo se centró en el trabajo de campo con los conductores del perímetro urbano, sino también con los empleados de la Alcaldía, en una actividad que contó con la coordinación de la administración municipal, a través de la secretaria de gobierno, Johana Velandia.
La capacitación que estuvo a cargo de Jimmy Silva, funcionario de la Dirección y algunos miembros de la Policía de Tránsito y Transporte, hizo especial énfasis en la necesidad que los motociclistas utilicen los elementos de protección establecidos por la ley, como el casco reglamentario.
También se recalcó en la importancia de no conducir en estado de embriaguez, por cuanto las sanciones de orden pecuniario son muy onerosas. “Adicionalmente un conductor que sea sorprendido conduciendo en estado de embriaguez y se niegue a realizarse la prueba de alcoholemia, tiene una sanción de 30 millones de pesos”, subrayó Silva.
