Ya han pasado seis días del proceso electoral en Colombia, ya en la mayoría de departamentos y municipios se saben quiénes son sus nuevos mandatarios a partir del próximo año, pero en Casanare aún no se han terminado de realizar los escrutinios, en especial, los departamentales, los cuales han sido suspendidos en dos oportunidades por problemas con los delegados del Consejo Nacional Electoral.
Pero y ¿quién o quiénes fueron los perdedores en las elecciones del domingo pasado en Casanare?, creemos que el primer perdedor fue la organización electoral desplegada para Casanare, así es, la autoridad electoral es la gran perdedora, y ello se reflejó desde el momento mismo de la emisión de los comunicados del preconteo, los cuales se demoraron más de la cuenta, lo que empezó a generar molestia en el electorado. Seguido a estas demoras empezaron a presentarse problemas con los jurados de las diferentes mesas, los cuales por errores “involuntarios” daban más las cifras de los votos obtenidos por “algunos candidatos”, a los cuales en el preconteo aparecían con 0 votos, y en el escrutinio les aparecían hasta mil votos.
Pero la cereza del pastel del proceso electoral en nuestro departamento la aportó el Consejo Nacional Electoral, al enviar como su delegado a un “corrupto” exalcalde de Cali, él cual tenía a cuestas 11 años de inhabilidad decretadas por la Procuraduría General de la Nación, por una serie de contratos “chimbos” que hizo mientras fue alcalde encargado de la capital salsera del país. El susodicho magistrado, al verse descubierto por un medio de comunicación regional, puso pies en polvorosa y en un ataque de “dignidad” renunció al cargo, por lo que hubo necesidad de suspender el escrutinio departamental. De inmediato el CNE, nombró el reemplazo del “corrupto” magistrado, pero más se demoró en posesionarse en el cargo que ser recusada por el apoderado jurídico de uno de los candidatos a la gobernación, lo que desencadenó en la suspensión del escrutinio departamental por segunda vez.
Otro de los factores que llevaron a la debacle a la organización electoral en Casanare, fue el “inservible” Tribunal de Garantías y Seguimiento Electoral de Casanare, una instancia nombrada por el CNE, para supuestamente vigilar el proceso electoral, pero se equivocaron en la escogencia de los tres integrantes de dicho tribunal, uno de ellos era contratista de la gobernación de Casanare, por ende tenía una inhabilidad “moral” (aunque eso legalmente no existe), e inclusive le hizo campaña a la actual senadora de Casanare; el otro integrante es de Bucaramanga, y según él viene al departamento cinco días a la semana, y de sus propios recursos paga su hospedaje y alimentación (altruismo puro); pero de resultados de su labor poco o nada.
Y como para rematar, se han evidenciado muchas irregularidades por parte de los jurados en el suministro de la información en el formulario E-14, los cuales en muchas oportunidades, fueron mal sumados los votos, en otros sencillamente no anotaban los votos de algunos candidatos, y en los peores de los casos fueron declarados nulos sin serlos.
Con todos estos inconvenientes, sumado a que a hoy no se han entregado las credenciales para diputados ni para la gobernación, es que el gran perdedor de las elecciones en Casanare, fue la autoridad electoral, a raíz de ello, será que tiene asidero el rumor que se propaga el algún sector del departamento de que ¿hubo fraude?