El pasado primero de enero se cumplió el primer año de gobierno de las administraciones municipales y departamentales en Colombia, para el caso de Yopal es un año perdido, se eligió a uno pero gobierna otra, la ciudad se hunde en la incertidumbre, la desidia administrativa, la corrupción, los convenios, la inestabilidad en los entes descentralizados, la inseguridad, la drogadicción, el aumento de habitantes de calle, robo a casas e instituciones educativas, entre otros.
Los yopaleños eligieron a Jhon Jairo Torres, quién tras posesionarse en el cargo empezó un tire y afloje con la justicia, la cual lo tiene tras las rejas en la actualidad, debido a ello, Yopal ha tenido una serie de alcaldes encargados, que empezó con Carlos Cárdenas, Luis Carlos Aponte y en la actualidad ocupa el cargo Luz Marina Cardozo; la inestabilidad también cobijo a las entidades descentralizadas, tanto en la ESE Salud Yopal como en la Ceiba ocuparon la silla de gerente cuatro personas.
Ahora bien, el balance de la gestión de este primer año de gobierno del movimiento «La Bendición” es lamentable, el presupuesto no se sabe a ciencia cierta en que se gastó ya que en el portal del Secop aparecen tan solo 5 licitaciones públicas que no superan los ocho mil millones de pesos, hay una serie de contrataciones directas de todo tipo la mayoría de un millón seiscientos mil pesos, de igual manera aparecen una serie de convenios con organizaciones “celestiales” para atender presuntamente a la población vulnerable de manera directa y rápida, convenios leoninos al punto de que la secretaria de Acción Social renunció al cargo antes que firmar uno de esos convenios.
La inestabilidad se ha visto reflejado en el gabinete municipal, en la secretaría privada van dos secretarios, en jurídica dos, la general tres, acción social tres, Idry dos, obras dos, planeación dos; aunado a ello está administración gobernó con el plan de desarrollo del anterior alcalde, ello debido a que el de la Bendición fue aprobado en agosto y armonizado el presupuesto en septiembre, por ende las promesas de campaña y anhelos del plan de desarrollo “una bendición para Yopal” no se lograron en el 2016.
Es pertinente mencionar que lo que más caracterizó a esta administración fueron los escándalos, tales como las constantes peleas entre la familia del alcalde Torres y la actual alcaldesa encargada, los escándalos de los múltiples convenios suscritos por la alcaldesa encargada con fundaciones celestiales, peleas con los artistas locales en las mal llamadas fiestas de Yopal, el no pago de la nómina a los docentes en diciembre por negligencia dela secretaría de educación, el afán por hacer aprobar del concejo municipal un acuerdo de vigencias futuras faltando escasos cinco días para terminar el periodo 2016, y que a la fecha no ha sido sancionado y peor aún no se conoce un solo contrato celebrado al tenor de dichas vigencias.
A todo lo anterior hay que sumarle que la alcaldesa de Yopal ocupa el último puesto entre los alcaldes de ciudades capitales en cuanto a gestión se refiere, no presentaron ningún proyecto a los Ocads, el Plan Integral de Movilidad Urbana y Rural Pimur no lo han recibido y por ende impera el caos vial en la ciudad, los huecos pululan en la malla vial, los prostíbulos ilegales se esparcen por toda la ciudad, no tenemos terminal de transportes sino un sucio paradero de buses, no tenemos planta de beneficio animal sino un contaminante matadero, no tenemos un buen servicio de agua y aseo sino una guerra de comunicados de prensa entre la empresa de servicios públicos y la alcaldía por los subsidios.
Las preguntas que ronda en el ambiente es ¿hasta cuándo padecerá Yopal esta ingobernabilidad?. ¿Qué pasó con el acuerdo de vigencias futuras?, ¿Cuál fue el motivo por el cual no le pagaron a los docentes de Yopal en diciembre?, ¿en qué gastaron los cerca de $220.000.000.000 millones de pesos del presupuesto del 2016?, ¿quién manda en la alcaldía de Yopal, Luz Marina, Camilo el hijo de ella, Natalia la de Hacienda o Suárez el jurídico?, mientras hallamos las respuestas, el año nuevo nos recibe con el anuncio delos docentes de Yopal de no iniciar el año lectivo en la fecha planeada debido a que la alcaldía no ha cumplido con la canasta educativa, no cesa la horrible noche.
