Comunidades del municipio de Orocué (indígenas, colonos, comerciantes, entre otros), claman ante el gobierno departamental para que emita un Decreto de restricción de movilidad de las tractomulas por la vía que conduce hacía la estación «Sardinas», la cual está siendo utilizada ante la problemática de derrame de crudo del oleoducto en Nunchía, el cual es operado por Perenco.
Como es de conocimiento público, en la vereda Sirivana de Nunchía se viene presentando un problema ambiental por el derrame de crudo sobre las aguas, al reventarse la tubería que lo lleva hasta la estación Araguaney en Yopal.
Perenco está utilizando como plan alterno la estación Sardinas en Orocué, pero las tractomulas han terminado de convertir la vía en una verdadera trocha, imposibilitando el tránsito de vehículos pequeños, ya que se quedan enterrados en los huecos que han profundizado las tractomulas; es por ello que las comunidades de Orocué exigen del departamento soluciones prontas, tendientes a que no se agrave la situación, mencionan que no es justo con ellos, por un lado el gobierno departamental no les pavimenta la vía, y por el otro las petroleras destruyen los poco que tienen de terraplén, sin siquiera ayudar a hacerle mantenimiento, inclusive varios sectores ya hablan de organizar un paro, hasta que les solucionen el problema.