Luego de un largo proceso de Reparación Directa interpuesto por la Diócesis de Yopal contra la alcaldía municipal por el no pago completo de los cánones de arrendamiento de la infraestructura donde funciona el colegio Centro Social, dichos pagos se daban de manera incompletos, en varias oportunidades los contratos se firmaban de manera tardía, y por ende la Diócesis decidió demandar al municipio.
Llama la atención de este proceso que la Diócesis cobra el canon de arrendamiento tanto por el lote (el cual fue donado para que se construyera dicho colegio) como por la infraestructura que allí se ha construido con el paso de los años, construcciones como los salones, canchas, unidades sanitarias, canchas deportivas, entre otras, las cuales en su gran mayoría se construyeron con los aportes de los padres de familia del colegio, como también con dineros públicos de las administraciones departamental y municipal, pero que usufructúa económicamente la Diócesis, es decir, unos construyeron pero otros cobran.
En el marco de la demanda de Reparación Directa, las partes lograron conciliar los cánones de arrendamiento que el municipio no le ha pagado a los propietarios del bien, el cual asciende a la suma de $780.232.829,29, los cuales se deben cancelar en 3 cuotas, una en este mes y la otra en junio del 2020, es decir, este gobierno le deja una deuda a la próxima administración de $390.116.414.
Lo que queda claro de esta situación es que la próxima administración municipal debe entrar a negociar con la Diócesis el valor del arriendo del año lectivo 2019, ya que no se ven acciones claras tendientes a la construcción de la sede propia del Centro Social, a pesar de tener el predio destinado para tal fin, mientras eso sucede la Diócesis se seguirá lucrando con el arrendamiento de esa infraestructura.
