Durante los últimos días se ha venido insistiendo sobre la crisis por la que atraviesa la salud en el país, pero en especial en el departamento de Casanare, en especial las IPS y ESEs públicas, a las cuales les han realizado mesas departamentales de salud y reuniones en Bogotá para tratar de lograr que las EPS les paguen las cuantiosas deudas que tienen con ellas.
Pero hay un sector bastante significativo a los cuales las autoridades administrativas no las han tenido en cuenta al momento de abordar las deudas de las EPS, se trata de las IPS privadas, a las cuales, el sistema las tiene prácticamente al borde de la quiebra, ya que son las últimas en lograr conciliar las cuentas con las entidades deudoras.
Tal es el caso de la emblemática Clínica Casanare, que durante más de 30 años ha prestado sus servicios al departamento, pero que la crisis la llevó a tocar fondo, y sus directivas decidieron arrendarla, ante la imposibilidad de seguir prestando sus servicios a los casanareños; es por ende que en pocos días, la recientemente compradora de Cafesalud, Medimás será la entidad que entrará a operar la clínica Casanare.
Finalmente, hay otra serie de IPS privadas que le viene prestando servicios a las EPS que también están con saldo en rojo y tienden a desaparecer, a pesar de que generan empleo, pagan impuestos locales, pero cuando se convoca a mesas de salud, no son invitadas, ellas esperan no tener que liquidar sus empresas pero con la situación actual, no ven un buen panorama.
