El Presidente Iván Duque reiteró hoy que Colombia no cerrará sus fronteras al éxodo de venezolanos, pero insistió en la necesidad de que “otros países de América Latina también asuman el compromiso de tener estatus de protección temporal migratoria para que no seamos solamente nosotros los que absorbemos ese flujo”.
El Jefe del Estado, quien este miércoles asistió a la instalación de la XXIV Reunión Plenaria del Círculo de Montevideo, resaltó que “la aptitud de Colombia frente a los hermanos venezolanos ha sido la de la fraternidad, no solamente frente a ellos, sino frente a los hijos y nietos de colombianos”, en un mundo donde muchos tienen sentimientos de xenofobia o se deciden por el aislacionismo.
Señaló que las fronteras abiertas generarán al país “presiones fiscales y sociales” y subrayó que ante “la más grave crisis migratoria que haya visto América Latina en su historia reciente, Colombia estará a la altura de las circunstancias”.
Afirmó que lo que vive Venezuela “es un drama. El drama de una región que por años dejó que la dictadura empezara a cobrar fuerza, vestida con el sacoleva de la democracia, hasta que por completo se tomó todos los poderes”.
En un auditorio integrado por expresidentes y líderes de la región, el Mandatario expresó su orgullo de haber suscrito, junto a otros gobernantes, la denuncia “contra el dictador de Venezuela ante la Corte Penal Internacional, no por política, sino por porque es moralmente necesario”.
Por último, el Presidente aseveró: “Tenemos que ser capaces internacionalmente de ejercer todas las presiones necesarias para que haya una verdadera transición a la democracia y un sentimiento de esperanza y de retorno”.
