La Contraloría General de la República, determinó la pérdida de $3.347.598.634,50, en la construcción del nuevo sistema de acueducto para el nuevo desarrollo urbanístico de Recetor, así como de la construcción de 54 unidades de abastecimiento individual de agua potable en sitios dispersos del sector rural del mimo municipio.
Los hechos se remontan al 2010, cuando la gobernación de Casanare, suscribe convenio con el municipio de Recetor, para acometer el desarrollo de las dos obras de saneamiento básico antes mencionados, y a su vez, el municipio de Recetor, firma convenio con la empresa de servicios públicos de dicho municipio para la ejecución de las obras. La Contraloría encontró serias deficiencias de planeación en las obras, así como la inadecuada elaboración de los estudios previos de los contratos por parte de la gobernación de Casanare, lo cual, generó la pérdida de los recursos públicos sin generar beneficios para la comunidad de Recetor, adicional a ello, desarrollaron un contrato a pesar de existir un estudio de Ingeominas, el cual determinó problemas del terreno por fallas de geológicas, lo cual, hacia inestable el terreno para desarrollar obras de estas características.
Por estos daños generados, la Contraloría encontró responsables fiscales a Jhon Miller Domínguez, quien para la época de los hechos era el gerente de la empresa de servicios públicos de Recetor, a título de culpa grave; a las empresas Emcoop Ltda, J J constructores y Cia Ltda, Corporación huellas de Paz; Martha Yorleny Jiménez, Diego Ignacio Arenas, Rodrigo Tadeo Flechas, entre otros.
Finalmente es de resaltar que de las pocas obras construidas, no sirven, otras fueron destruidas por deslizamientos de tierra, otras quedaron a medio construir, pero a pesar de ello, se le giraron recursos al contratista. Es de aclarar, que al exalcalde Ramón Ignacio Fonseca, no le imputaron responsabilidad por estos hechos, ya que cuando llegó al cargo las obras ya se estaban ejecutando, ya que los contratos fueron firmados en el 2010.