La Unidad para las Víctimas avanzó en la fase de diagnóstico del daño con el sujeto colectivo corregimiento La Chapa, ubicado en el municipio de Hato Corozal (Casanare), en el marco del proceso de reparación colectiva de esta comunidad.
Dicha fase consiste en la aplicación de herramientas para que el sujeto de reparación colectiva identifique los daños que el conflicto armado dejó en cada uno de sus atributos: Autorreconocimiento y reconocimiento por terceros; Proyecto colectivo; Prácticas colectivas; Formas de organización y relacionamiento, y Territorio.
“Esta fase del proceso de reparación colectiva es especialmente importante porque permite la expresión del sufrimiento, la construcción de conocimiento sobre el daño colectivo, el reconocimiento de las capacidades de afrontamiento y la recuperación del sentido colectivo”, dijo Carlos Pardo Alezones, director de la Unidad en el Meta y los Llanos Orientales.
Además, el funcionario resaltó que de este proceso dependen directamente las medidas de reparación que se aplicarán más adelante.
La entidad espera que en el primer semestre de 2021 termine la fase de diagnóstico y se pueda proceder con la formulación del Plan Integral de Reparación Colectiva