Oportuna fue la acción de la Policía que en una carrera contra el tiempo logró la liberación de un jovencito de 13 años secuestrado hacia las 4:50 de la tarde de ayer en las calles de Yopal.
El menor fue obligado a subir a la fuerza a un vehículo Mazda-2, blanco, cuyas características fueron plenamente establecidas gracias a que otra persona grabó con su celular el vehículo ante las voces de auxilio del muchacho.
Lloroso, luciendo gorra y chaleco del Gaula de la Policía y todavía confundido pero en buen estado de salud, el jovencito Johan Stiven A., fue entregado a sus padres que lo recibieron en medio de un fuerte abrazo, en las instalaciones de la Policía de Casanare.
Según la coronel, Lucía Cristina Vanegas, el chico fue obligado a abordar el carro, en el sector de la calle 22 con carrera 24, por un hombre y una mujer, a lo cual ofreció resistencia y pidió ayuda.
El carro fue identificado plenamente, y gracias a eso la Policia dio inicio a una operación que permitió la ubicación del carro e incluso del propietario quien alegó que le había prestado el vehículo a un familiar.
“Los padres de familia comenzaron a ubicarlo pero los papás apenas sobre las 10:30 de la noche se acercaron a un CAI a pedir el apoyo de la Policía, nosotros ya estábamos en la pista del caso”, dijo la oficial de la Policía.
La comandante agradeció la tarea del grupo policial a cargo de la investigación, conformado por unos 60 uniformados que finalmente lo ubicaron en la madrugada de hoy en la vereda Los Mangos.
El joven es hijo de un empresario propietario de una bodega de cerveza.
Según la coronel, el muchacho fue citado luego de que los delincuentes simularon un mensaje de Facebook desde el perfil de una amiga de colegio que le puso una cita, situación que facilitó su rapto por parte de los delincuentes.