Durante un sepelio familiares descubrieron que les habían entregado a la persona que no era.

Una verdadera película de terror vivieron  los familiares de Georgina Álvarez Chávez de 81 años, quien falleció en la madrugada del martes 7 de Julio, pues cuando se disponian a realizar el sepelio en un cementario de Sincelejo Sucre, los familiares identifican que el cuerpo no correspondía a la persona fallecida.

Dentro del desespero y la duda, una de sus hijas abrió el ataúd y si importar los protocolos de bioseguridad, empezó a romper las bolsas con las cuales estaba envuelto el cuerpo, vaya sopresa que al ir rompiendo estas, se percató además que el cuerpo estaba boca a bajo, lo que le generó mayor frustración, y decidió voltear el cuerpo de quien sería su madre, pero vaya sorpresa que al destapar el rostro ella y los demás familiares, se dan cuenta que no es la señora Georgina Álvarez y procedieron a dejar el ataúd abierto y buscar el cuerpo de su verdadero familiar.