El 10 de diciembre del año 2019, La Empresa Departamental de Servicios Públicos de Casanare, Acuatodos, adjudicó y firmó el contrato 065 de 2019, esta empresa se rige por la modalidad de contratación denominada “Régimen Especial” y se supone que hizo invitación privada a varias empresas para que presentarán propuestas, pero solamente se presentó una (1) a pesar de que el contrato era por la suma de $32.411.434.391 (treinta y dos mil cuatrocientos once millones cuatrocientos treinta y cuatro mil trescientos noventa y un mil pesos), este contrato tiene como objeto “OPTIMIZACIÓN DE LA INFRAESTRUCTURA PARA EL MANEJO DE LAS AGUAS LLUVIAS Y OBRAS COMPLEMENTARIAS SOBRE LA MARGINAL DE LA SELVA ENTRE LA BRIGADA 16 Y EL CAÑO USÍVAR DEL MUNICIPIO DE YOPAL, DEPARTAMENTO DE CASANARE” , con un plazo de ejecución de 10 meses, es decir, debe entregarse en el mes de octubre de este año.
Pero infortunadamente, han transcurrido 7 meses desde la adjudicación del contrato, y lo único que se ha hecho de este contrato es la tala de varios árboles en la ribera del canal perimetral a la vía Marginal de la Selva, en inmediaciones de la ciudadela La Decisión, dicha tala generó molestia de los vecinos al punto de que Corporinoquia tuvo que actuar sobre el tema, a pesar de que en los estudios previos del contrato se dejó constancia de que este proyecto no necesitaba permiso ambiental, y la demarcación con “palos con cinta” en algunos puntos de la orilla del canal.
Cabe mencionar que según la minuta, al contratista se le asignaría el 50% del valor del contrato como anticipo una vez firmada el acta de inicio, la cual en el portal del Secop aún no aparece, es decir, no hay claridad sobre si al contratista se le giraron esos recursos.
Ahora bien, según la minuta del contrato, las obras abarcan desde la remoción de todo lo que existe actualmente en el canal desde el inicio del cantón de la Octava División del Ejército, hasta el caño Usívar, demolición que a la fecha no se ha realizado, aunado a ello, se debe tapar el canal y sobre esa capa construir ciclorutas, canchas, plazoletas y zonas duras, arborizar e instalar mobiliario urbano, instalar semáforos, alumbrado público, entre otros, o sea, una empresa de servicios públicos construyendo obras ajenas a su razón de ser.
La interventoría de este contrato fue adjudicada el 18 de diciembre del 2019, por un valor de $1.855.861.105, con una duración de 11 meses, pero en el portal del Secop no figura “colgada” el acta de inicio, y se menciona en la minuta que como anticipo se le daba el 50% del valor del contrato.
A pesar de que la mayoría de obras civiles en el departamento reiniciaron sus trabajos en medio del establecimiento de protocolos de bioseguridad, esta obra no ha iniciado, en los sitios donde se talaron los árboles ya se enmontó la maleza, los migrantes venezolanos tomaron el lugar como refugio momentáneo a su paso por la ciudad, el caño Usívar sigue recibiendo los escombros y basura que resulta del procesos de escorrentía por las lluvias, y ya se observan colchones, bolsas, entre otros elementos en su cauce.
Frente a estas “irregularidades” nos asaltan una serie de interrogantes al respecto, así: Será que ¿este proyecto hace parte de las 104 obras inconclusas que se establecieron en el departamento de Casanare por parte de la Contraloría General de la República?, ¿existirán actas de suspensión de las obras?, ¿les habrán girado los anticipos tanto al contratista de la obra como a la firma interventora?, será que en caso de que se les hayan girado los anticipos ¿los intereses devengados se le giraran a Acuatodos?, ¿por qué no están publicadas las actas de inicio de la obra y la interventoría?, ¿este proyecto contará con autorización de Corporinoquia para la tala de árboles y disposición final de aguas?, ¿cuándo reiniciarán las obras?, ¿cuántas ayudas humanitarias su hubiesen podido adquirir para la población vulnerable del departamento con estos recursos para mitigar la cuarentena?, ¿será necesario un otrosí al contrato por el incremento de los materiales durante la cuarentena?, ¿liquidará Acuatodos los contratos a sabiendas del presunto incumplimiento de los contratistas? , ¿era necesaria está obra?, ¿estaba contemplada en el plan de desarrollo departamental?. Intentaremos entrevistar a los funcionarios de Acuatodos para que nos den respuestas a los interrogantes planteados.