En la reciente auditoría realizada por la Contraloría Departamental de Casanare, a Enerca, vigencia 2019, quedó al descubierto la grave crisis económica que atraviesa la empresa, al sumar un déficit de e $37.056.667.192, de los cuales en el año 2020 se han cancelado $15.911.569.694, con un saldo por pagar de $28,700,868,649; lo cual denota una difícil situación financiera para la empresa, toda vez que son obligaciones de efectivo con cargo a las vigencias 2018 y 2019, cuyo cierre fiscal, en especial de este último, no muestra capacidad de pago por el problema del déficit presupuestal que, a su vez, se refleja en el resultado negativo de la Situación de Tesorería.
Otro problema acumulado en Enerca, tiene que ver con la cartera por cobrar, la cual es de $16.497.795.925, cuyo cobro no ha sido posible y gran parte de esa cartera esta clasificada como de “difícil cobro”, es decir, esa plata se perdió, ya que poco o nada se ha hecho de gestión para tratar de realizar los cobros por vía judicial, adicional a ello, los cobros realzados son ínfimos frente a la cantidad de deudores reportados, lo que genera un enorme hueco fiscal, ello debido a según la Contraloría “es evidente que no hay un proceso sistemático e integral para adelantar eficientemente las acciones de recuperación de cartera que se requieren, ni un adecuado registro y control a la misma”.
Otro boquete que tiene en líos a Enerca, es el relacionado con el pago de sanciones y multas que para el 2019 canceló $180.736.462, al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar- ICBF, Superintendencia de Industria y Comercio, Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, Fondo de tecnologías de la información y las comunicaciones y Municipio de Aguazul, con lo cual el ente de control determinó un hallazgo fiscal por $180.736.462, los cuales en la investigación se determinará quienes fueron los responsables de esas multa y sanciones para de esa manera realizar juicios fiscales.
De igual manera se evidenciaron pérdidas en la compra y venta de energía, ya que la que se compró no fue utilizada por los usuarios y por ende debió ser vendida al mercado en bolsa, pero en esa transacción se vendió a menos precio de lo que se compró, con una pérdida de $10.032.016.958, lo que acrecentaron las pérdidas de la empresa en la vigencia 2019.
Con base en el informe de la auditoría a Enerca, se hace necesario que la junta directiva tomé decisiones de fondo de cara a salvar la empresa, ya que de continuar con esas pérdidas la superservicios entraría a intervenirla con fines de liquidación, lo cual sería grave para el departamento.