Abundante material de prueba recopilado por la Fiscalía General de la Nación permitió poner en evidencia a Alfonso Vesga Rojas, alias Pingo, quien sería uno de los mayores proveedores de armas y medicamentos de uso restringido o de alto costo para las disidencias de las Farc y otros grupos ilícitos, que delinquen en Caquetá y otros departamentos del oriente del país.
Este hombre, al parecer, obtenía fusiles, ametralladoras, pistolas, lanzagranadas, munición y otros elementos en diferentes unidades militares, con el supuesto apoyo de exintegrantes de la fuerza pública que han sido y condenados por tráfico de armas.
En el curso del proceso, personal de policía judicial detectó que en el último año alias Pingo habría recibido giros por cerca de $200’000.000, los cuales no ha podido justificar y estarían relacionados con la entrega de armas, explosivos y otros elementos.
De otra parte, hay indicios de que conseguía medicamentos para interrumpir embarazos, tratar enfermedades tropicales, de alto costo o uso restringido; así como multivitamínicos y analgésicos, a través de una red señalada de robar vehículos de carga que ingresaba productos farmacéuticos de Ecuador.
Alfonso Vesga Rojas fue capturado en el barrio Piedrahita de Florencia (Caquetá), durante una inspección de antecedentes que realizaban unidades de la Policía Nacional. Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales le imputó los delitos de fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos agravado; y enriquecimiento ilícito de particulares.
Alias Pingo no aceptó los cargos y, por disposición de un juez de control de garantías, deberá cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario.
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