Durante muchos años Sabanalarga había sido sinónimo de la naranja, e inclusive allí las fiestas patronales son denominadas “el festival de la naranja”, pero infortunadamente hoy no se observan cultivos de esta fruta, pero aún se conservan varios árboles en casas y algunos potreros del municipio.
Para este año la administración municipal de La Perla de Casanare, como popularmente se conoce al municipio de Sabanalarga, ha decidido recuperar parte de la historia creada alrededor de la naranja, y es por ende que el acalde de esa localidad, William Roa, decidió suscribir una alianza con la empresa TGI, para sembrar árboles de esta fruta en el casco urbano del municipio, el primer componente de este proyecto es la siembre de cuatro mil árboles, de los cuales, ya llegaron al municipio los primeros mil, los cuales serán sembrados una vez se termine el estudio de georreferenciación para determinar los sitios propicios para su ubicación, y la empresa TGI ayudará en el cuidado de ellos una vez sean sembrados.
Aunado a lo anterior, se viene trabajando por parte de la gestora social del municipio, Gisel Paola Clavijo, una serie de proyectos tendientes a que mujeres del municipio trabajen productos, con base en esta fruta, ya se tiene planes pilotos para la elaboración de panela con sabor a naranja, postres, tortas y otros manjares, cuyo componente principal sea esta fruta.
Se espera que al final de la actual administración municipal se tengan en plena marcha estos proyectos, que los árboles sembrados estén en pleno desarrollo, y que en el municipio se haya construido el parque de la naranja, para que propios y visitantes encuentren un sitio de turismo propio de la región, y se pueda realizar el verdadero «festival de la naranja» sin tener que llevar la fruta de otros departamentos.
