Un preocupante panorama financiero reflejó Enerca al cierre del año contable del 2020, las deudas acumuladas están asfixiando a la empresa, al punto que la Superintendencia de Servicios Públicos, continúa haciéndole seguimiento especial según lo dio a conocer la superintendente Natasha Avendaño, en su visita al departamento la semana anterior.
Según los estados financieros presentados con corte al 31 de diciembre del 2020 (publicados en el portal de Enerca), los pasivos corrientes (deudas y obligaciones que han de ser satisfechas por la empresa en un plazo de tiempo inferior a 1 año) ascienden a $107.137.871.293, dicho pasivo incluye prestamos, cuentas por pagar, beneficios a empleados, provisiones y otros pasivos.
De otra parte, los pasivos no corrientes (está integrado por deudas y obligaciones que la entidad ha de pagar en un plazo de tiempo superior a 1 año) ascienden a $47.762.140.945, estos pasivos incluyen prestamos por pagar y otros pasivos.
Es decir que la deuda total de Enerca es de $154.900.012.218, situación que tiene encendidas las alarmas tanto de los directivos de la empresa como de la superservicios, las soluciones deben de tomarse de manera inmediata para evitar una posible intervención.
Enerca tiene unas gastos que ha venido generando aumento en su deuda, los cuales tiene que ver por un lado con el pago de remuneración de activos a terceros, es decir lo que la empresa le paga a la EBSA, la cual es propietaria de una serie de instalaciones y redes de distribución muy viejas, y por las cuales se pagan $9.795.399469 anuales, y por el otro lado está el pago de los intereses de los créditos, el cual ronda los 385 millones de pesos.
Para el año 2021 el presupuesto de Enerca es de $276.387.170.191, lo que la convierte en una de las empresas de servicios públicos de la Orinoquia con más ventas.
