Un absurdo, insólito y fatal evento sucedió en el Hospital de Yopal la noche del viernes 11 de enero de 2019. La joven Leidy Johana Calderón, acudió al centro asistencial el jueves 10 de enero porque consideró que estaba próxima a dar a luz a su segunda hija. Presentó su historia clínica de control perinatal. Fue valorada por el galeno de turno que no encontró nada anormal y ningún signo de alarma.
Le dieron salida para regresar a su casa. El viernes 11 de enero al persistir los dolores tipo cólico y sangrado, la materna volvió por urgencias al hospital, después de tres horas de espera, fue valorada por el médico de turno que dispuso dejarla e iniciar trabajo de parto, informándole el procedimiento a su esposo y su mamá que estaban pendientes.
Antes de la media noche los familiares fueron informados sobre el nacimiento de una hermosa niña, que todo había salido bien en parto normal, y que al otro día le darían de alta. A la altura de la 3 de la mañana del día sábado 12 de enero, alguien llamó del hospital a la mamá de la materna, Asunción Calderón y le informó que su hija Leidy Johana había fallecido. Los familiares al verificar la terrible noticia endilgan negligencia y descuido al cuerpo médico pues al parecer la joven murió después del parto y nadie se percató.
El mismo sábado 12, el esposo instauró la respectiva denuncia penal contra tres médicos que atendieron el caso. Leidy Johana era integrante de la conocida familia Rodríguez de Nunchía. La fiscalía asumió el proceso, inspeccionó el cadáver que fue llevado inmediatamente a Medicina Legal para la investigación y establecer responsabilidades. En pleno siglo XXI, una materna acude al hospital a recibir la vida; pero jamás a recibir la muerte. En cuanto a la responsabilidad administrativa del centro asistencial estatal el abogado Amílcar Rodríguez Bohórquez especialista en derecho administrativo, asumió el caso para llevarlo ante los jueces con el medio de control de reparación directa.
