Con la llegada de la pandemia del covid-19 al departamento de Casanare, las entidades territoriales y descentralizadas de la administración pública acogieron la declaratoria de urgencia manifiesta para realzar la contratación requerida para mitigar la propagación del virus en el departamento. Es por ello que Red Salud Casanare decidió suscribir el contrato 437 del 23 de abril de 2020, para la compra de 2.000 pruebas rápidas de laboratorio clínico para covid-19, las cuales tuvieron un costo total de $98.000.000 ($49.000 por prueba).
Pero según una auditoría realizada a Red Salud Casanare, por parte de la Contraloría departamental, se determinó que había un presunto sobrecosto en el valor pagado por cada prueba rápida, el sobrecosto fue valorado en $33.336.000, debido a que el ente de control solicitó varias cotizaciones a empresas que suministran este tipo de productos, y obtuvo respuesta de 3 laboratorios, los cuales cobraban $30.000, $31.996, y $35.000, haciendo el promedio del valor de las 3 cotizaciones obtuvieron un precio de $31.996, es decir, $17.004 pesos menos que lo que pago Red Salud Casanare.
En la misma auditoría de la Contraloría, se evidenció otro presunto sobrecosto en la compra de 17 celulares (16 de baja gama y 1 de gama media), por los cuales se pagaron $3.164.000, pero en el mercado esos mismos equipos tiene un valor de $1.816.667, es decir, el sobrecosto es de $1.347.333, lo que al igual que el contrato de las pruebas rápidas, se configura una gestión fiscal antieconómica por parte de Red Salud Casanare, al evidenciarse problemas con la elaboración de los estudios de mercado.
El total de la auditoría arrojó que se encontraron 3 hallazgos administrativos, 2 fiscales por valor de $34.683.333, y 1 disciplinario.