Nuevamente la comunidad educativa de la ciudad de Yopal se ve sorprendida con la terminación del servicio de alimentación escolar, faltando pocos días para la culminación de clases en los colegios públicos de la capital casanareña, la terminación del servicio inició ayer 12 de noviembre según memorando emitido por la secretaría de educación municipal, a todos los rectores.
El contrato en mención es el 0837 del 23 de mayo del 2019, cuya acta de inicio se firmó el 6 de junio, y tiene un tiempo de ejecución de 5 meses, es decir, terminó el 5 de noviembre, aquí está la primera falla, ya que según el calendario escolar, las clases terminan el 22 de noviembre, por lo que hubo una mala planeación del contrato, seguido a este problema, el contratista presentó varios incumplimientos en la ejecución del contrato, lo que generó protestas de los estudiantes en varias instituciones, por el mal servicio en unos casos, y en otros la mala preparación de los alimentos, dichos incumplimientos fueron reconocidos por la supervisión del contrato de manera tardía.
Otro de los incumplimientos del contratista tenía que ver con el pago puntual a sus empleados, así como también el pago de la seguridad social, ya que según denuncias, el contratista no pagaba a tiempo dichas obligaciones, las cuales fueron dadas a conocer a la administración municipal, y sólo hasta el pasado 4 de octubre tomaron decisiones al respecto, ya que se firmó un otrosí al contrato, modificando la cláusula 4 del contrato inicial, que versa sobre el valor y forma de pago, aclarando que las actas parciales serán canceladas una vez se presenten los soportes de pago de salarios y seguridad social de los empleados, pero llama la atención que ya se había pagado un acta parcial sin estos requisitos.
Aunado a lo anterior, llama la atención si el contratista tiene o tenía el músculo financiero para prestar un servicio sin anticipo, ya que según las actas parciales canceladas, no hubo anticipo, y en el Secop sólo figuran 2 actas parciales canceladas por valor de $1.427.362.840, correspondientes a los meses de julio y agosto, lo que se supone que se le deben los meses de junio, septiembre y octubre, pero lo que no se entiende son los motivos por los cuales la supervisión decide no prorrogar el contrato, ya que el comunicado de prensa es muy superficial, lo único cierto, es que los muchachos se quedaron sin alimentación escolar, a pesar de que el municipio tiene los recursos para garantizarlo.
