El sueño de la familia Vargas, con don Juan y doña Hortencia a la cabeza, lo cumplió su hija Milena, una emprendedora, visionaria del sector turístico, quien junto a su amiga y compañera de Colegio, Ángela Tovar, convirtieron el tradicional Fundo Canaguay en Maní Casanare, en una verdadera joya del turismo casanareño.
La historia cuenta que los terrenos donde convergen maravillas naturales que sorprenden a turistas locales e internacionales, es un patrimonio familiar que conserva todas las características de la identidad llanera, comenzando por la atención generosa de sus propietarios, quienes abren sus puertas para brindar a sus visitantes la mejor experiencia posible, única e inolvidable.
Cuando aún cursaba sus estudios de contaduría pública, la joven Milena, inició el proceso de planificación de un sueño en compañía de su amiga, negocios internacionales, quien decidió apostar por crear una oportunidad en la inmensidad del llano. Hoy, el Fundo Canaguay, al cual se ha vinculado Omar Romero el esposo de Milena, simboliza un lugar casi obligado para visitar si la ruta guía al turista con destino a Maní.
Funcionamiento:
El Fundo, ha contado con la visita de turistas provenientes de países como Alemania, Dinamarca y Chile, así como colombianos que se sorprenden con las bondades y colores del llano.
“Un turista que llega y se conecta con el Fundo, es un reconocimiento para el trabajo que todos realizamos acá” comenta Milena.
Uno de los principios claros del Fundo, además de su autenticidad y guardar la tradición llanera en cada detalle, es lograr que sus visitantes vivan una experiencia de hogar, que se sientan en casa, con la confianza y naturalidad que eso representa. Los propietarios de este hermoso lugar, ubicado a una hora vía terrestre de Yopal, tiene clara la importancia que posee el sector turístico para la economía, sus impactos en diferentes sectores y cómo se debe fortalecer a nivel estructural en beneficio de gran parte de la población.
