A pesar de que las autoridades han realizado diferentes operativos hacía esta población en donde les han informado sobre la prohibición de la tenencia de los menores de edad en las calles o semáforos, durante las últimas semanas se viene incrementando la llegada de más población venezolana a la ciudad, lo que ha ocasionado que la presencia de familias con niños, incluso algunos de brazos en los diferentes semáforos y calles de mayor tráfico de la ciudad aumente significativamente.
Lo preocupante de la situación es que en varias ocasiones la ciudadanía ha observado como los padres los dejan solos por varios minutos en los separadores, exponiéndolos a ser atropellados por quienes transitan esos sectores, principalmente en horas pico.
Este medio de comunicación habló con varias de estas familias que se ubican en los semáforos desde muy tempranas horas y se retiran tarde de la noche. Conocimos el caso de Jonathan Ramírez, su esposa, su cuñada y tres menores quienes todos los días desde hace dos meses, escogieron el semáforo de la calle 40 con carrera 11 para vender bolsas de basura y así conseguir dinero para la comida y el pago diario de la residencia.
Cuando les preguntamos sobre el riesgo que los niños tenían al permanecer en este sitio, respondieron que mientras dos de ellos ofrecen las bolsas de basura, uno de ellos esta pendiente de los tres menores y así evitar que alguno de ellos se baje del separador, indican que no les queda de otra porque no tienen quien se los cuide y necesitan salir a buscar dinero para darles sus comidas.
Por su parte, Genesis Echenique esposa de Jonathan y quien cargaba en brazos a su niña dijo a suversión, que tienen que hacer eso por la necesidad que tienen, agregó que sienten miedo de que los niños sean atropellados en este lugar, esperan que la gente les ayuden en algo y con su rostro de tristeza y su mirada perdida indicó que ya sienten el rechazo de los Yopaleños, quienes en algunos casos los han tratado mal y a ella y a su hermana, en varias ocasiones les solicitan servicios sexuales, saben que ya han muchos venezolanos en la ciudad y que ellos están en la ciudad por necesidad, no porque hayan querido venir.
Además de sentir el rechazo estos venezolanos también reconocieron la ayuda que algunas personas les han brindado, como la comida, la ropa y en algunos casos el dinero que les sirve para el pago de la residencia. (Ver Historia Completa en el Vídeo).
Casos como el de esta familia son muchos en la ciudad, en donde la necesidad los lleva a poner en peligro la vida de sus hijos. Es importante mencionar que la Policía Nacional a través de la especialidad de Infancia y Adolescencia en los casos donde se observen o la ciudadanía denuncie sobre la permanencia de menores de edad solos en los semáforos, inician un proceso de restablecimiento de derechos, dejando a los niños a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Hasta el momento, la Alcaldía de Yopal no ha dado a conocer acciones que de una u otra manera ayuden un poco a familias en estas condiciones y mientras tanto otras a diario siguen llegando, en busca de oportunidades ya siendo conocedores del rechazo y molestia que generan a parte de la ciudadanía Yopaleña, como consecuencia de la participación de algunos venezolanos en la comisión de delitos, en su mayoría hurtos y por el pedir dinero en casi todos los semáforos y zonas de parqueo.